Pensión completa tipo pensión regular

Estoy unos días de hotel de tres estrellas en playa, de los de pensión completa con menús tipo pensión. Hay mucho extranjero en el hotel, de variada edad y tipo, pero seguro que muchos de ellos quedarán ingratamente sorprendidos de la comida.

Hoy he tomado tres pequeñas porciones de tres ensaladas. De palito de cangrejo, de pasta y de gulas. Los colores en las tres eran muy distintos, pero curiosamente los sabores eran idénticos. Entiendo que es complicado de lograr, pero para eso están los cocineros sin escuela. 

Tenía también para elegir garbanzos con callos aceptables, pasta rellana insípida, berenjenas rellenas de carne picada con puré de patata y sopa minestrone.

Los segundos se dividían entre flamenquines de incierto relleno, alas de pavo en salsa de champiñones correcta, rape pequeñitos en salsa tipo romesco pero sin lograr y con mejillones buenos y una especie de lenguado a filetes de incierto nacimiento familiar. 

Los postres eran variados y con mucha fruta lo que se agradece.

Cierto que es muy mejorable, cierto también que el precio de la pensión completa parece irrisorio, pero o cuidamos al turismo con más imaginación o jorobaremos el invento. Muchas veces depende solo de la calidad profesional de los trabajadores, de medio sueldo más en un complejo de más de 300 habitaciones.